lunes, 29 de diciembre de 2008

Uno nuevo

El ladrón

No pasa un día
sin que me atraque la sospecha
de que algún ladrón
cabrón
le guinda del bolsillo a mi reloj
un par de horas.
No hay noche en que no despierte
de repente
para sorprender en pleno acto de rapiña
al artesano cruel
que le saca punta al minutero.
Duermo con un martillo bajo la almohada
o un libro amigo de tapas duras
que viene a ser lo mismo.
Tengo conciencia atómica del sonido baboso
que producen al alejarse mis segundos
pero sólo logro adivinar con quién se van
cuando se han ido.
Me he reconciliado con mi sombra
al comprobar que la pobre se mueve
cada vez
un poco menos
y se esconde asustada
entre mis pies
cuando llega el mediodía.
Dice mi doctora que es normal
y que me ve mucho mejor
cuando acudo atardecido a su consulta
e insiste en que no deje las pastillas.

Pero alguien
se está quedando con mi tiempo
para venderlo los domingos en el rastro
y lo peor es que sospecho
de mi complicidad en el asunto.
No pienso denunciar el robo
pronto
se quedará sin nada que quitarme
pero resulta insoportable
la sospecha de que conozco al delincuente
casi tanto
como creía conocerme mi mismo.

Estoy considerando
seriamente
empezar
a beber
otra vez.

Una fábula

Vida de un deportista


Tras perder
la última carrera
la liebre abandonó la competición
se casó con una coneja millonaria
e hizo que le planchen
cada arruga.
Por las mañanas
descansa en su mansión
y algunas veces suspira solidaria
mientras desayuna
sopa de tortuga.

Se acaba el año pero no la poesía




Allí estaremos Oscar Aguado y yo, para dar la brasa con los poemas del libro y seguro que alguno nuevo. Allí estará Marcus Versus, editor y poeta, y allí estará Casimiro Parker, muso del proyecto, aunque tal vez, dada su tendencia a no llamar la atención, no lo veas. Pero estar, estará.

lunes, 15 de diciembre de 2008

Reseña de José Angel Barrueco

Yo también puedo escribir una jodida historia de amor, de Carlos Salem


Carlos Salem es un francotirador de la escritura. Dispara con bala (las palabras, certeras y bien escogidas) y acierta. En este volumen de relatos es capaz de sacarle otro partido a las 12 definiciones del diccionario de "ligar" (Ligar, en todos los sentidos), de enfrentar a dos personajes con su creador por culpa de una chica (Triángulo), de humanizar a una diosa sin bajarla del pedestal (El pedo más bello del mundo), de lograr que un caco robe muebles y objetos para entregárselos a una mujer que vive en un piso en cuyas esquinas hay demasiados huecos (El ladrón enamorado), de retratar a tres personas que quizá no tengan nada que ver entre sí para que sea el lector quien escoja las afinidades (Teselas), de concebir historias imposibles por correspondencia (La carta prometida, Tus cartas me dan la vida), de enamorar a quien sólo quiere cerrar ventanas de quien sólo desea abrirlas (Ventanas)... Historias de amor, pero no al uso. Y siempre con la maestría de Salem para el juego.
El libro se presenta esta noche en el Bukowski Club. No creo que pueda acudir pero, si te pilla cerca, ve y, al menos, compra un ejemplar: no te vas a arrepentir.

Reseña de "Yo tambien puedo..."

Un jodido libro fantástico.
(Yo también puedo escribir una jodida historia de amor)
Por José Ramón Gómez Cabezas.

Hacía tiempo que no me divertía tanto leyendo y no me refiero a troncharme de risa ni nada parecido. Divertido, uno de los diccionarios escolares de mi hija lo define así: Que divierte o hace pasar el tiempo de manera alegre y entretenida.
Y es que la narrativa de Carlos Salem es así, me atrevería a aventurar por las pocas veces que hemos coincidido o lo he podido escuchar en su breve rincón bukolicoliterario que incluso el propio Carlos Salem es una persona alegre y divertida, al menos esa es la impresión que causa a pesar de su oscura vestimenta de corsario de otros tiempos. Cuando le oyes hablar te das cuenta que a diferencia de alguna suegra él no monologa de una manera casi inconsciente, si no que su discurso te va mostrando un camino ( de ida supongo) que te atrapa desde el principio y te va echando carnaza en forma de guiños y floridos poéticos escatológicoartísticos.
El nuevo libro de relatos de título tan cínico como genial “Yo también puedo escribir una jodida historia de amor” contiene de alguna forma la esencia de todos nosotros. Me explico. Enamoramiento, amor, desamor, desengaño, soledad, nostalgia...por favor, si alguien nunca ha pasado por alguno de los anteriores estados emocionales que intente localizarme, aún no hice el doctorado y su caso podría valerme una tesis.
Carlos Salem nos cuenta esa cotidianeidad nuestra de cada día desde el punto de vista del poeta voyeur que consciente de su poderoso verbo florido lo va dosificando poco a poco, atrapándote como el buen cantaor de flamenco con cada requiebro hasta que al final acunado por su narrativa al lector no le queda otro remedio que rendirse a su lectura y atrapado por el incesante eco que deja cada final de historia se ve lanzado a devorar la siguiente de manera compulsiva.
Y aparte de toda esta cursilería adjetivada que les acabo de ofrecer y que podría despistar al posible lector de “Yo también..” Una obligada recomendación para aquellos que se sientan minimamente atraídos por este libro, lean el índice del mismo y como la Hidra aquella bicéfala no podrán apartar la vista de esta genialidad de apenas 140 páginas. Y recuerden, beban, hidrátense para no convertirse en estatua de sal.

YO TAMBIEN PUEDO ESCRIBIR UNA JODIDA HISTORIA DE AMOR
Carlos Salem.
EDICIONES ESCALERA, 2008.

Reseña de "Yo tambien puedo..."

Un jodido libro fantástico.
(Yo también puedo escribir una jodida historia de amor)
Por José Ramón Gómez Cabezas.

Hacía tiempo que no me divertía tanto leyendo y no me refiero a troncharme de risa ni nada parecido. Divertido, uno de los diccionarios escolares de mi hija lo define así: Que divierte o hace pasar el tiempo de manera alegre y entretenida.
Y es que la narrativa de Carlos Salem es así, me atrevería a aventurar por las pocas veces que hemos coincidido o lo he podido escuchar en su breve rincón bukolicoliterario que incluso el propio Carlos Salem es una persona alegre y divertida, al menos esa es la impresión que causa a pesar de su oscura vestimenta de corsario de otros tiempos. Cuando le oyes hablar te das cuenta que a diferencia de alguna suegra él no monologa de una manera casi inconsciente, si no que su discurso te va mostrando un camino ( de ida supongo) que te atrapa desde el principio y te va echando carnaza en forma de guiños y floridos poéticos escatológicoartísticos.
El nuevo libro de relatos de título tan cínico como genial “Yo también puedo escribir una jodida historia de amor” contiene de alguna forma la esencia de todos nosotros. Me explico. Enamoramiento, amor, desamor, desengaño, soledad, nostalgia...por favor, si alguien nunca ha pasado por alguno de los anteriores estados emocionales que intente localizarme, aún no hice el doctorado y su caso podría valerme una tesis.
Carlos Salem nos cuenta esa cotidianeidad nuestra de cada día desde el punto de vista del poeta voyeur que consciente de su poderoso verbo florido lo va dosificando poco a poco, atrapándote como el buen cantaor de flamenco con cada requiebro hasta que al final acunado por su narrativa al lector no le queda otro remedio que rendirse a su lectura y atrapado por el incesante eco que deja cada final de historia se ve lanzado a devorar la siguiente de manera compulsiva.
Y aparte de toda esta cursilería adjetivada que les acabo de ofrecer y que podría despistar al posible lector de “Yo también..” Una obligada recomendación para aquellos que se sientan minimamente atraídos por este libro, lean el índice del mismo y como la Hidra aquella bicéfala no podrán apartar la vista de esta genialidad de apenas 140 páginas. Y recuerden, beban, hidrátense para no convertirse en estatua de sal.

YO TAMBIEN PUEDO ESCRIBIR UNA JODIDA HISTORIA DE AMOR
Carlos Salem.
EDICIONES ESCALERA, 2008.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Nueva editorial de poesía




Nabce Ya lo dijo Casimiro Pârker, editorial dedicada a la poesía, que se presenta la próxima semana con los dos primeros libros: "Canción de cuna para un héroe", de Oscar Aguado y "Si dios me pide un bloody mary" (este es culpa mía). Las presentaciones-recitales serán el viernes 19 de diciembre (Salem)
y sábado 20 de diciembre (Aguado)
Ambas en el Bukowski club
Prometemos no cantar villancicos en ninguna de ambas citas.

martes, 25 de noviembre de 2008

Angel Petisme gana el VII Premio Internacional de Poesía Claudio Rodríguez.

El poeta aragonés Ángel Petisme (Calatayud, Zaragoza, 1961) ha resultado ganador del VII Premio Internacional de Poesía Claudio Rodríguez, dotado con 6.000 euros y la edición del poemario ganador, titulado 'Cinta transportadora', en la editorial Hiperión.
El jurado se hallaba integrado por Jesús Munárrriz, Luis García Jambrina, Emilio Sola, Juan Van Halen y Jesús Losada, con la coordinación de Pedro García. Se trata, a juicio del jurado, de un poemario "moderno, arriesgado, ágil, dotado de tecnicismos pero de fácil lectura".
El jurado dio a conocer el viernes tarde el fallo del premio que convoca el Instituto de Estudios Zamoranos Florián de Ocampo, al que en esta edición se presentaron 284 originales poéticos procedentes de una veintena de países, entre ellos Australia, China, Argentina, Nicaragua o El Salvador, según ha informado el presidente del IEZ, Pedro García Álvarez.
«Es un libro aparentemente de viajes, que se halla dividido en cuatro bloques. Se trata de una reflexión sobre ciudades: del corazón, del miedo y de los sueños. En verso y prosa, aunque una y otra no aparecen mezcladas», aseguraba Petisme al diario La opinión de Zamora, tras conocer el fallo. El poeta, que reside en Madrid y reconoce influencias de la poesía goliárdica, el romanticismo inglés, la vanguardia surrealista y la generación beat, mostraba su satisfacción. «Estoy contento con la escritura de este libro. No tenía duda a la hora de presentarme, aunque no soy de los que acuden a los premios literarios». Su satisfacción, advertía, era doble. «También por el nombre de Claudio, que es el "culpable" de que comenzase a escribir. Para mí, es un referente. Por su hondura, su aliento, su misterio, su magia. Es una de las voces en castellano más importantes de todos los tiempos».
Poeta, cantautor y licenciado en Filología Hispánica, Petisme cuenta con una bibliografía extensa. Es autor, entre otros poemarios, de "Cosmética y terror", "El Océano de las Escrituras", "Constelaciones al abrir la nevera", "Buenos días, colesterol", “Insomnio de Ramalah” o “Demolición del Arco Iris”.

www.angelpetisme.com http://petisme.wordpress.com/


Comunicación y prensa: Javier García
Music Bus
C/ Pujades, 158 bis, 2º 1ª
08005 Barcelona
Tel. +34 93 320 82 92
info@musicbus.es

viernes, 21 de noviembre de 2008

Viernes 28 de noviembre




Como escribe mi hermanito Oyola, nunca empieza.explota. de una.
Acá andamos con el tercer libro en año y medio, esta vez con el amor en la mira. Como dice La Cabra Mecánica, "es la falta de amor la que llena los bares", de modo que en este último tiempo he visto bastante del asunto.
La idea es presentar el libro el viernes que viene en el BUKOWSKI, acompañado por el maestro GONZALO TORRENTE MALVIDO, en una fiesta doméstica, antes de empezar con las presetaciones protoclorarias de rigor, que molan, pero en ellas no tienes delante a algunos de los personajes sobre los que has escrito cambiándoles lo necesario para que no te partan la cara.

De modo que el que no pueda venir el viernes que viene, podrás hacerlo (si le sale de los cojones), en enero en la FNAC y al alguna otra presentación en marcha. Pero se perderá lo que tienen las presentaciones en el BUKO: el humo, el ambiente y esa sensación de que fuera del bar el tiempo corre en otra dirección.

Son 20 relatos (o 31, según se mire, porque uno está formado por 12 micreorelatos), y cada uno está dedicado a alguien que conozco y respeto.


Yo también puedo escribir una jodida historia de amor
(A Óscar Urra)

Triángulo
(A Jokin)

Qué extraño, amor
(A Gonzalo Torrente Malvido)

Pentágono
(A Juan Guinot)

El pedo más bello del mundo
(A Edwin)

No quiero acordarme
(A Carmen Sandoval)

Memoria para el olvido

(A mi mismo, si vivo lo suficiente)

Ventanas
(A Ana y Epi)

Un lunar con forma de estrella

(A Superloyds)


Cabeza hueca

(A Elia Maqueda)

Eclipse

(A Arturo Martínez)

Diminutas sabanitas voladoras

(A Daniel Herrera)

Pompas de jabón
A Inés Pradilla)

La carta prometida
(A Óscar Aguado)

Apuntes para una breve historia del artisteo (el primer enamorado)
(A Silvi, Patty u Escandar)

Tus cartas me dan la vida

(A Juan Pinilla)

El ladrón enamorado
(A Leo Oyola)

Tarde de miércoles
(A Cris y Mac)

Ligar, en todos los sentidos
(A Pablo Mazo, que es un maestro)

Teselas
( A Reyes y Naveiras)

martes, 18 de noviembre de 2008





LA TERTULIA POÉTICA “indiojuan”
le invita a la presentación del libro


Parque de destrucciones
del poeta
Rodrigo Galarza



Jueves, 20 de noviembre de 2008, 19 h.
C/. Lope de Vega, 38- 2ª planta. Sala 2.1

Desaforismos y fabulimias

Credo

Llevo 49 años sin creer en dios
pero a veces pienso
que él cree en mi
(si no, no se explica)


Biografía


Nació con los ojos abiertos
mirando hacia arriba
vivió mirando de frente
lo enterraron con los ojos abiertos
mirando hacia arriba


No lo dijo El Principito

La verdad
es
una mentira
a-bor-ta-da



Por favor


Quiéreme casi tanto
como me quiero a mi mismo
pero no me perdones
los olvidos


Coartadas

El torturador
siempre
tiene
una excusa
la víctima
no


FABULIMIAS

Esopo en crisis

¿Cómo le sentará a previsora la hormiga
que nadie la respete
dormir oyendo gritos
cubierta de cartones
cuando la sacrosanta economía
tire por el retrete
todos sus ahorritos
de los cojones?


La buena bestia

Se quedó dormido a orillas de un sueño de cristal
y despertó cubierto por escamas
de cinc
de cobre
y de tungsteno.
Y desde entonces caza mucho menos
porque en el bosque los bichos ya lo oyen llegar
y bailan catalá y otras danzas olvidadas
antes de que él inunde en llamaradas
todo el claro.
Un par de ardillas ya han echado los papeles
para que le concedan el subsidio que corresponde
a todo dragón que se ha quedado en paro.

Este jueves, en el BUKOWSKI CLUB

jueves, 6 de noviembre de 2008

AGOTADA "MATAR LA ROPA"




LA CULPA ES VUESTRA.

Ya no quedan ejemplares en almacenes y sólo hay lo que queda en algunas librerías. Y por si alguien se ha quedado con las ganas, que no se suicide: A finales de este mes sale a la venta la SEGUNDA EDICIÓN.
La lista de agradecimientos ocuparía más páginas que la novela,y seguro que se me olvidaría alguien, así que este
GRACIAS es para todos. Sois la leche

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Aparece en breve (y hay más novedades)




¿Yo escribiendo historias de amor? Mira por dónde...
Resulta que me propusieron publicar un libro de relatos y ya tenía mono. Faltan meses para que salga la nueva novela (Pero sigo siendo el rey, y en muchas entrevistas y reseñas me presentaban como un autor centrado en la novela negra (a mucha honra), pero como todo el mundo sabe, uno es un romántico incurable, y al echar un vistazo a los relatos que me apetecía publicar y los que me apetecía escribir, me di cuenta de que el amor estaba presente en todos, de una u otra forma. Claro que el amor como yo lo entiendo no es como lo entiende Corín Tellado, precisamenre...
De modo que en diciembre saldrá a la venta "Yo también puedo escribir una jodida historia de amor",con prólogo del gran Gonzalo Torrente Malvido y editado por Escalera.

Total, que en eso estamos.
Y en otro proyecto que me hace mucha ilusión pero del que no hablaré todavía, para no chafarlo. No soy supersticioso, porque trae mala suerte, pero prefiero esperar...

Sábado 8, 21.00 horas. Poesía internacional en el Bukowski Club

Carmen Yáñez (Chile)
Eloy Santos (España)
Jant Núñez (Colombia)
Sebastián Abad (Argentina)
Luis Rafael Hernández (Cuba)


21.00 horas (Puntualidad)
BUKOWSKI CLUB
San Vicente Ferrer, 25
Metro Tribunal
MADRID

Entrada libre


Carmen Yáñez Hidalgo
Publica su primer libro en España (1998)Ateneo Obrero de Gijón, Colección Deva, “Paisaje de Luna Fría”,traducido al italiano y publicado por “Ugo Guanda Editore” en Italia (1998), “Habitata dalla memoria” en 2001 y “Tierra de Manzanas”2006 Ugo Guanda Editore, colección Fenice Contemporanea, “Alas del viento”, 2006 en España, Ediciones, Elogio del Horizonte y en Francia, traducida por Atelier de traduction D´espagnol de Saint Malo de La Maison des poètes et des Écrivains.
Libro inédito próximo a salir “Latitud de Sueños”
Ha participado en diversos Festivales Internacionales de Poesía.
Premio de poesía “Nicolás Guillén” 2002.Forma parte del consejo de redacción de la revista del Salón del Libro Iberoamericano de Gijón, Asturias, España. Vivió en Suecia, Estocolmo y Gotemburgo (1981-1997) Reside en España, Asturias, Gijón desde julio de 1997.

Eloy Santos
Poeta, periodista cultural y traductor, es licenciado en filología románica. Ha vivido en Roma durante la mayor parte de su vida, por lo que sus primeros poemas han sido editados en italiano, como es el caso del poemario NETTUNARIA E ALTR POESIE (2002) y una selección poética en las antologías LINGUE DI MARE, LINGUE DI TERRA (1999) y OMAGGIO ALLA POESIA SPAGNOLA (2004).
Obtuvo el Primer Premio del concurso Alonso de Ercilla con el poemario DONDE NADIE DICE (2003) y es autor de LIBRO DE OLAS, publicado en 2006 por la editorial ELOGIO DEL HORIZONTE.
Actualmente reside en salamanca.


Janet Núñez


NACIÓ EN BARRANQUILLA, COLOMBIA, EN 1962.
Durante diez años trabajó como productora y asisrente de dirección en documentales y magazines culturales en cine y televisión. Ejercció la docencia en las áreas de producción de televisión y guión cinematográfico de la Escuela Distrital de Artes de Barranquilla y fue productora general de eventos del Instituto distrital de Cultura de la misma ciudad.
En 2006 publicó su poemario Equipaje para desahuciados.
Pecados de intención es su segundo poemario editado en España.

Sebastian Abad

Poemario publicado: "Poemas del desdibuje". 1º premio del concurso "Cardenal de poesía" por Ed. Siesta. Integrante grupo de poesía intercultural "Transpoeterna". Publicaciones en revistas de poesía argentinas.Publicaciones revistas literarias online. Integrante de grupo y revista de cultura hispanoamericana "Madrigal", Suecia. Poemarios inéditos: "Puentes de agua" y "Cuestión de tiempo".


Luis Rafael Hernández

Narrador, poeta y ensayista. Dirigió la revista literaria Jácara (1995-2005). Ha publicado los libros Un bosque por dentro (cuento, 1990), En la Casa del Hombre (poesía, 1995), Dos leyendas (narrativa, 1996), Juana, el talento precoz (ensayo, 1998), Cartas al padre (poesía, en edición bilingüe español-árabe, 2000), El Modernismo martiano, nuestro Modernismo (ensayo, 2001), El detective Perrín acude al llamado (cuentos policíacos para niños, 2002), Los hijos de Adán (cuento, 2002), La vuelta del viejo a su juventud y otros cuentos eróticos de la antigua Arabia (versiones en colaboración con Abdul H. Sadoun, 2003), Colómbico (poesía, 2003), Eliseo Diego: donde la demasiada luz (ensayo, 2004), Cuentos para dormir (cuentos para niños, 2005), Crece en mi cuerpo el mundo (poesía para niños, 2005), Mulato (novela para jóvenes, 2006). Compiló y publicó diversas antologías de literatura hispanoamericana. Tiene casi una docena de libros para niños y varias obras en proceso de edición.
Sus trabajos han sido incluidos en revistas y periódicos de Cuba, México, Uruguay, Venezuela, España, Inglaterra, Rusia, Francia, Bolivia, Israel, Siria, Grecia, Portugal, EE. UU. y Holanda.

"RECORTABLES", de Elia Maqueda, este viernes en el Bukowski club




viernes 7 de noviembre - 21:30
en el Bukowski Club
C/San Vicente Ferrer, 25
(Metro Tribunal) - Madrid



Presentación del poemario
Recortables
(Elia Maqueda)
publicado por Anidia Editores
(prólogo de Raúl Vacas y portada de Dabiz del Reino )


(Y si no puedes venir, cómpralo aquí:
http://anidiaeditores.com/ficha_libro.php?id=21&idautor=10



Mas información:
http://myclownworld.blogspot.com/ (Blog de Elia Maqueda)
http://www.anidiaeditores.com/
http://raulvacaspolo.blogspot.com/
Daviz delreino: http://www.gentearrugada.com/

jueves, 16 de octubre de 2008

Sábado, sabadete...



...pero después de escuchar a Ricardo Bórnez y Marcus Versus (vaya par de gemelas)
La poesía de Ricardo, libre y comprometida ( y que alguien me demuestre que eso es una contradicción), se define desde el título, que recuerda y advierte: "Vivir provisional"

Mañana empieza "Matar y guardar la ropa" en Radio Círculo

Para que luego digan que el crimen siempre tiene su castigo. A partir del viernes 17 de octubre, inicio una sección semanal dedicada al género negro en el programa "LA CUADRATURA DEL CIRCULO", de RADIO CÍRCULO, del CIRCULO DE BELLAS ARTES DE MADRID (Me ha quedado un post muy circular).
El caso es que el director del programa, Mariano Crespo, seguramente aquejado de locura transitoria, me ha ofrecido un espacio para hablar de lo nuevo y lo de siempre en materia de literatura policial, y si la autoridad no lo impide, ahí estaré, dando la lata, todos los viernes, a partir de las 16.00 horas.
El programa empieza a las 15.00 y merece la pena seguirlo.
En Madrid se puede sintonizar en el 100.4 de FM, y por vía internet, en

http://www.circulobellasartes.com/ag_radio.php

¿El título de la sección? MATAR Y GUARDAR LA ROPA. Y para el que piense que es un asqueroso intento de autobombo de mi novela, le diré que SÍ. Pero creo que es también una forma de exponer lo que hacemos con la Novela Negra: asomarnos al lado oscuro de la vida desde la seguridad de un libro. No lo critico , ya que llevo toda la vida haciéndolo y me gusta cada vez más.
Se aceptan sugerencias,colaboraciones y obsequios en efectivo... También críticas, pero para hacerlo, tendrás que escucharme...

NOVEDAD: EN CADA EMISIÓN (CADA VIERNES) LEERÉ AL FINAL DE LA SECCIÓN UNO DE LOS MAGNÍFICOS RELATOS DEL CONCURSO "200 PALABRAS" DE NOVELPOL". EL PRIMERO SERÁ:" NUNCA CAMBIARÉ", DE RICARDO BOSQUE

Carlos Salem Sola
www.mataryguardarlaropa.blogspot.com
www.elhuevoizquierdodeltalento.blogspot.com

sábado, 11 de octubre de 2008

Novela Negra en Radio Círculo





Para que luego digan que el crimen siempre tiene su castigo. A partir del viernes 17 de octubre, inicio una sección semanal dedicada al género negro en el programa "LA CUADRATURA DEL CIRCULO", de RADIO CÍRCULO, del CIRCULO DE BELLAS ARTES DE MADRID (Me ha quedado un post muy circular).
El caso es que el director del programa, Mariano Crespo, seguramente aquejado de locura transitoria, me ha ofrecido un espacio para hablar de lo nuevo y lo de siempre en materia de literatura policial, y si la autoridad no lo impide, ahí estaré, dando la lata, todos los viernes, a partir de las 16.00 horas. El programa empieza a las 15.00 y merece la pena seguirlo.
En Madrid se puede sintonizar en el 100.4 de FM, y por vía internet, en http://www.circulobellasartes.com/ag_radio.php

¿El título de la sección? MATAR Y GUARDAR LA ROPA. Y para el que piense que es un asqueroso intento de autobombo de mi novela, le diré que SÍ. Pero creo que es también una forma de exponer lo que hacemos con la Novela Negra: asomarnos al lado oscuro de la vida desde la seguridad de un libro. No lo critico , ya que llevo toda la vida haciéndolo y me gusta cada vez más.
Se aceptan sugerencias,colaboraciones y obsequios en efectivo... También críticas, pero para hacerlo, tendrás que escucharme...

sábado, 6 de septiembre de 2008

Pagaría por no verte




Cuando se dice que la veteranía es un grado, se corre el peligro de incurrir en una de esas frase hechas que tanto joden al bueno de Salvo Montalbano. Pero mal que le pese al comisario de Vigatà, en ocasiones esos tópicos contienen verdades como puños americanos. Es el caso del escritor argentino Juan Sasturain y la vuelta de su veterano detective Julio Etchenike en "Pagaría por no verte". Pedazo de título, extraído sabiamente de un tango en flor (verso de Celedonio Flores, nada menos), que viene que ni pintado para el nuevo caso del investigador jubilado creado por Sasturain y situado en los años finales de la última dictadura argentina.

Etchenike, que se presentó en 1985 y 1987 con Manual para perdedores (en dos tomos) y siguió sus andanzas en 1988 con Arena en los zapatos, es un oficial de la policía viudo y jubilado, que ha vendido su casa para montar un despacho de detectives a una edad en que otros se dedican a espiar minifaldas desde el banco de un plaza o controlar el trabajo de los albañiles en las obras públicas. Es como si, saturado por lo que ocurre en el país, en el que la justicia se ha convertido en una farsa, el veterano decidiera hacer justicia con minúsculas por su cuenta,a la manera de un Marlowe porteño y otoñal, que necesita creer en algo para no reventar de asco acumulado.

Casi veinte años después, Sasturain recupera a Etchenike y supongo que no es casual que lo haga, ahora que todo aquello suena a leyenda para los chicos de veintipocos. Más que meterse en el panfleto - y podría y habría con qué- el escritor corta y cose a medida y con puntadas certeras un policial clásico en la forma y teñido de un humor que también se podría definir como chandleriano si no fuera porque Sasturain lleva más de tres décadas ejerciéndolo.

Escoge con acierto una trama en la que la vida personal y el pasado de Etchenike se ven implicados en la investigación, con lo que logra -viejo zorro- que los que llegamos tarde al personaje andemos como locos buscando los libros anteriores del detective jubilado. Y sin embargo, Pagaría por no verte es independiente. se puede leer y disfrutar sin saber nada anterior del personaje.

Otra ventaja son los capítulos cortos, cada uno con su propio título y cargados de sentido. No sobre una palabra ni un diálogo, y cuando llegas al final, dan ganas de correr a por más Etchenike.

Uno, que modestamente lleva adelante una cruzada para reivindicar la figura del detective privado, ahora que todo son maderos con GPS incorporado o investigadores de sillón y archivo, no puede menos que celebrar la épica cotidiana de un personaje que sigue adelante porque no aprendió a caminar hacia atrás, y para el que la conciencia y la almohada son la misma cosa.

La pregunta es: ¿qué coño pasa que estos libros no se editan aquí?

En cuanto junte un dinero, contrato a Etchenike para que lo averigüe...







Para lectores españoles sin miedo a comprar por internet, el cambio hace que podamos pedirlos por ese medio y (si somos listos y encargamos algún libro más para rentabilizar el envío, "Arena en los zapatos", por ejemplo), el coste final siga siendo inferior o similar al que pagaríamos si lo compráramos en la librería de la vuelta de le esquina. Adjunto un link, pero hay más, que uno no está a comisión de nadie:
http://www.tematika.com/libros/ficcion_y_literatura--1/novelas--1/argentina--3/pagaria_por_no_verte--473430.htm


Para saber más: http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Sasturain

viernes, 5 de septiembre de 2008

Al maestro, con cariño




LA NOTICIA:


Andrea Camilleri gana
el II Premio Internacional de Novela Negra RBA


En La muerte de Amalia Sacerdote "es el mismo lector
quien debe desenmascarar la trama"




Barcelona, 4 de septiembre de 2008 - La muerte de Amalia Sacerdote, de Andrea Camilleri, ha sido la obra ganadora de la segunda edición del Premio Internacional de Novela Negra RBA. El conocido popularmente como “Crimen del Garlasco” -un hecho real bastante famoso en Italia por la gran repercusión que tuvo en los medios de comunicación- le ha servido a Camilleri como punto de partida para crear la novela.

De esta forma, Camilleri se alza con el galardón mejor dotado de este género -cuyo reintegro asciende a 125.000 euros-, y firma así su primera novela policíaca sin la presencia de Salvo Montalbano, su entrañable comisario de policía. Según el autor, “a diferencia de la saga Montalbano, en esta obra no hay un detective que investigue los hechos, sino que es el mismo lector quien debe desenmascarar la trama”.

La novela, que adopta desde su primera página “un enfoque periodístico”, según el autor, transcurre en la redacción de la RAI en Palermo. La capital de la Sicilia contemporánea, ha sido el escenario elegido por el autor para desarrollar esta magnífica trama en donde política, mafia y familia conforman una red tan sólida, que hasta la justicia y los medios de comunicación están a su servicio.

El escritor, director teatral y guionista italiano, que no ha podido asistir a la entrega, ha querido agradecer el premio mediante videoconferencia y ha enviado un mensaje a sus lectores españoles: “En el pasado se decía que el medio era el mensaje, para mi, mi mensaje son mis libros. Yo como lector leo autores españoles, por lo que se produce un intercambio continuo, la maravilla de la inexistencia de obstáculos”. Asimismo, Camilleri ha querido destacar que ”desde España me llega un mensaje de libertad, y no puedo decir lo mismo de lo que veo aquí, en Italia….”

Lorenzo Silva, encargado de comunicar el fallo del jurado, ha destacado “la solidez de la trama criminal, la construcción de los personajes y la maestría en el manejo de la intriga” de la obra ganadora. Silva, portavoz del jurado integrado por Soledad Puértolas y Suso de Toro, el periodista Antonio Lozano y la editora de RBA Anik Lapointe, ha querido destacar la novela “Giley”, de Julián Ibáñez, “por su especial interés y por presentar una vía novedosa dentro del género español”.

Joaquim Palau, director general de RBA Libros, ha querido destacar que el premio pretende consolidar al grupo como especialista en el género negro, al tiempo que, “colabora a que el género negro sea considerado como literatura con mayúsculas”.

Joaquim Palau también ha hecho una especial mención a Francisco González Ledesma, vencedor de la primera edición del Premio con el libro Una novela de barrio que desde su publicación ha cosechado grandes críticas, y se ha convertido en uno de los libros más leídos de este año”.

La muerte de Amalia Sacerdote llegará a las estanterías de las librerías españolas el 9 de octubre y, a principios del 2009, ya estará disponible también para su público en Italia de la mano de la editorial Sellerio Editore.


EL COMENTARIO:


Hay mucha gente que lee novelas y aún no conoce a Andrea Camilleri. También, por suerte, hay mucha gente que lo conoce y contagia. Para los primeros, no cabe duda de que el premio RBA supondrá el anzuelo para pescarlos en las aguas mediterráneas del escritor siciliano. Descubrirán por qué este veterano viejo zorro te atrapa desde la aparente sencillez y te convierte en cómplice.

Camilleri usa el humor para envolvernos en sus palabras, porque estoy convencido de que conoce un secreto que los demás ignoramos. Y es un humor de aquí, mediterráneo, latino y milenario a la vez. Cualquiera que lea una de sus historias sobre Vigatà (tanto la serie de Montablano como las otras novelas), creerá que está en un pueblo cualquiera de esta España que se apoya en el mar pero siempre mira más lejos.
En lugar de reflejarnos en los autores yanquis y copiarles los tics, los que pretendemos escribir novelas con un fondo policial deberíamos tomar ejemplo del maestro y darnos una vuelta literaria por cualquier pueblo de nuestras costas, agrandado hasta creerse ciudad.
Allí encontraríamos la risa y los cuernos, la muerte y los pulpitos, la sopa del mar en la que necesariamente nos cocemos y nos renovamos.
Allí está todo pero nos acercamos con prevenciones, como si un crimen cometido en Ronda tuviera menos glamour que uno perpetrado en Queens. Ese complejo del chico de la vuelta de la esquina (subestimar lo cercano porque lo damos por sabido aunque no sepamos nada) no es exclusivo de aquí. También estaba presente en mi otro país,la Argentina en la que nací y tengo enterrado el ombligo.

Generaciones y generaciones de intelectuales que se han gastado buscando la cuadratura del círculo, experimentos con y sin gaseosa para mostrarse como vanguardia o modernidad, y todo para que el viejo pícaro y sabio nos de una lección de humildad en novelas como La forma del agua, El olor de la noche, La voz del violín, La temporada de caza, El movimiento del caballo... podría seguir hasta agotar toda la obra de Camilleri, y siempre me reservaría una enseñanza en su nueva novela, la que sea, la que le salga de ahí escribir en ese momento, porque con la pila de años que tiene, el siciliano se niega a renunciar a contar su aldea sin amargura y sin concesiones.

Me alegra el premio pero como a cualquier camillerista me entristece que el premio suponga muchos más lectores, muchos más escritores en potencia, muchos más candidatos a comprender la sencilla lección magistral de Camilleri, que para mí se basa en tres puntos:
1) a la literatura hay que tomársela en serio entre carcajadas, como a la vida.
2) la solemnidad mata al arte o por lo menos impide que se le ponga dura.
3) Los lectores no son gilipollas, aunque a veces dejen que se los trate como a tales.

Camilleri aplica esa recetas en todo lo que escribe y todo lo que escribe llega, conmueve, provoca. Y lo hace sin estridencias, sin códigos davincis o templarios pasados de fecha.
Salvo que me engañe la memoria (mala mujer), en ninguna de sus tramas aparecen conspiraciones de alcance nacional, ni depende de Montalbano salvar el mundo ni el país. Se conforma con salvar al individuo, al mejor estilo de Chandler pero frente al mar, comiendo unos salmonetes como para ponerles un piso y dudando entre el amor y la cómoda soledad del que nunca está solo del todo.

He cometido la audacia de poner a un Camilleri desnudo y astuto dentro de la trama de Matar y guardar la ropa. Sé que, si alguna vez llega a leer el libro, el viejo maestro se reirá del descaro de este novato de 48 años que tal vez aprendió algo a fuerza de leerlo una y otra vez. Y confieso sin vergüenza que uno de los gustos que quisiera poder darme si esto de los libros funciona, sería conocerlo en persona y sentarme con él, en una roca plana para ver cómo el agua lava la tierra sin prisa, y maldecir, juntos, cuando se acerque una nube.

jueves, 4 de septiembre de 2008

Reseña de Antonio Martínez Asensio en Antena 3 noticias







Ya solo el hecho de plantear una novela negra en un camping nudista tiene su punto. Efectivamente, no hay mucho sitio para guardar la pistola. Porque tiene que haber pistola, claro. Y es que en el territorio de la novela negra conviven ya demasiadas cosas, para mi gusto: cabe casi todo mientras haya un perdedor y una pistola por medio.

Esta novela contiene historias de asesinos a sueldos, de amores imposibles, de iniciaciones, de padres y familias rotas, tiene nostalgia, humor, violencia, sexo, y nos habla también de la muerte y de la condición humana. Hay un poco de todo, y como en la buena mesa, a veces los ingredientes no se notan, porque están bien ligados por un buen cocinero, y Carlos Salem tiene una voz propia, sin duda y sabe hacerlo (aunque se prodiga poco). Texto completo en http://blogs.antena3.com/tiempodesilencio/entry/matar_y_guardar_la_ropa


Antonio Martínez Asensio

Antonio Martínez Asensio nació en Madrid en 1964. Estudió Filología Hispánica en la Universidad Autónoma de Madrid y empezó muy pronto a trabajar en el mundo de la televisión: en TVE, en Tele 5 y en Canal+, así como en varias productoras independientes. Ha desarrollado una labor de crítico literario en la radio como colaborador en varios programas. Ha escrito guiones para series de televisión y para el cine. Es subdirector del programa dirigido por Isabel Gemio en Onda Cero, "Te doy mi palabra", donde también presenta la sección literaria de los domingos. Ha publicado un ensayo en clave de humor titulado ¡Mi mujer está embarazada! (Grand Guignol Ediciones), que va a ser traducido al italiano y que quiere ser una guía del embarazo para los padres (y no para las madres). Va a publicar próximamente su primera novela, En soledad.

sábado, 30 de agosto de 2008

Reseña de El Pescador de demonios, por Elia Barceló





(No hace mucho me refería a Steve Redwood y su novela El pescador de demonios, con la sana intención de colgar en breve en este blog una reseña de la misma. Pero después de ller la que ha escrito toda una autoridad en el asunto, como Elia Barceló, comprendí que lo mejor que podía hacer era aceptar mis limitaciones y reproducir la suya. Aquí va)

El pescador de demonios, Steve Redwood

Trad. Frank Schleper. El Tercer Nombre, Madrid, 2008. 383 pp. 19 €

Elia Barceló
La editorial El Tercer Nombre, que comenzó su andadura en 2004 y ya lleva más de cincuenta títulos publicados, nos ofrece ahora con El pescador de demonios, de Steve Redwood, la traducción al español de Fisher of Devils, novela que en el año de su publicación en Gran Bretaña (2003), fue nominada al prestigioso British Fantasy Award, que por fin ganó China Mieville con Iron Council.
No conozco la novela de Mieville, pero me atrevo a decir que si ganó debió de ser por cuestión de gustos de los miembros del jurado, ya que El pescador de demonios es una magnífica novela, tan plena, tan variada y tan rica en registros y emociones que puedo recomendarla a todo tipo de lector aunque, por supuesto, cuanto más sentido del humor tenga ese lector y más interés por los mitos fundacionales de la religión cristiana, más disfrutará de su lectura.
La historia que narra Steve Redwood no es precisamente modesta: comienza con la Creación y termina un poco después del Apocalipsis, un Apocalipsis muy especial. Sus escenarios son el jardín del Eden, el Infierno, el Limbo y el Cielo, con un par de paradas en la Estación de Tránsito. Sus protagonistas son Dios, Satán, San Pedro, Adán, Eva, la serpiente y su mujer, la Virgen María, los principales arcángeles y los principales demonios, más un par de santos y varios personajes infernales.
Y, a pesar de que después de esta enumeración, uno puede pensar que la novela tiene que ser una especie de delirio sin pies ni cabeza, no lo es en absoluto. Es una obra coherente, intensa, divertida y tierna, muy tierna, en la que el lector se identifica con muchos de los personajes, que son profundamente humanos, incluso los ángeles y los demonios.
Hace muchos años, cuando se publicó La saga/fuga de J.B., de Gonzalo Torrente Ballester, creo que fue Carmen Martín Gaite la que dijo en su reseña que la novela era «un gran disparate, considerando el disparate como género literario». En ese sentido, también la novela de Redwood lo es, enfatizando tanto el «disparate» como el «grande». Por eso es imprescindible el sentido del humor para leerla y disfrutarla como se merece.
A lo largo de la obra vamos viendo cómo la creación de Dios —que es uno entre muchos de los Dioses Nebulosos y, como todos ellos, presenta sus creaciones en las convenciones divinas e incluso ha ganado un premio por sus diseños— se va estropeando, al principio por culpa de Adán, que resulta ser un pelmazo, siempre descontento, y luego por la intervención de cada vez más humanos en los asuntos celestes (todos los santos que van llegando al Cielo, después de su muerte en este mundo). Aunque tampoco hay que olvidar los problemas que surgen primero por la rebelión de Lucifer y luego por los turbios manejos del Arcángel San Miguel —un fundamentalista y reaccionario de armas tomar—.
El hilo conductor de la novela, después de la primera parte en el Edén, en la que se sientan las bases y se presentan muchos de los personajes principales, es la visita de San Pedro al Infierno con una misión secreta, destinada a impedir el inminente Apocalipsis. Aquí, en la segunda parte, Redwood nos lleva de viaje por el Infierno, que es un planeta yermo y abrasador, donde convive una población autóctona —los sagarrines— con los ángeles caídos y los condenados, y nos hace asistir a manejos y conjuras políticos que reconocemos de inmediato como alegoría de nuestro propio mundo, a trepidantes escenas de combates en los que San Jorge —el del dragón— brilla por su valor y su absoluta estupidez–, rocambolescas y divertidísimas intrigas, problemas cada vez más acuciantes que afectarán a la creación entera.
Pero donde más brilla Steve Redwood, junto con sus magníficas descripciones, es en la creación de personajes: su Satán es, en mi opinión, el mejor desde Milton, a quien debe no poco. Desde su primera aparición en el Edén, como ángel caído —un ser torturado, ennegrecido, con las alas rotas, que conoce a Eva por casualidad y se enamora perdidamente—, lo vemos como Señor del Infierno —fanfarrón, intrigante, con toques de tirano de cualquier república bananera— y, poco a poco, como amigo leal, como ser destrozado por la nostalgia de lo perdido, como enamorado casi sin esperanza, dispuesto a recuperar lo que una vez fue suyo.
Pero si Satán es un personaje redondo y pleno, Eva es un lujo para cualquier lectora. Raras veces se encuentran descripciones de una mujer tan hermosas y entregadas como las que hace Redwood de la madre de la humanidad.
Cuando asistimos al nacimiento de Eva, leemos:
«Dios había destilado de la bruta fuerza física de los músculos de Adán el conmovedor poder de la belleza: la delicada curva de la nuca, los esbeltos brazos con apenas una sombra de pelo y una corriente sumergida de tímidas venas recorriéndolos, el elegante movimiento de cintura y cadera, los rizados arpegios del vello del vientre, las frescas y lánguidas cadencias de muslo y pierna. Una nueva clase de belleza. Una nueva clase de armonía. Una nueva clase de poder».
Y, al contemplar a la nueva criatura, el arcángel San Rafael dice:
«es como si Dios mismo se hubiera quedado atrapado dentro de ella, o al menos una parte de él, y ahora estuviera llorando por no conseguir escapar.»
Pero Eva no sólo es bella. Mi fragmento favorito, el que da la medida del concepto que nos presenta Redwood de la diferencia entre el hombre y la mujer, es el siguiente:
«Y luego quedaban sólo unos ojos perplejos, pero tranquilos, de un ser vivo que ve la vida por primera vez.
—Hola —dijo Eva—. ¿Quién eres?
Y Dios tuvo que sonreir porque Adán había preguntado —igual que Lucifer mucho tiempo antes—: ¿Quién soy?»
La traducción, de Frank Schleper, es buena, aunque no siempre acaba de alcanzar ni la gracia del original en los pasajes divertidos —cosa que es notoriamente difícil, si no imposible, cuando se trata de sutiles juegos de palabras o pequeñas variaciones de frases hechas— ni la musicalidad y la magia de los líricos, pero se nota la atención y el cariño que ha puesto en su trabajo, y el resultado se lee con agrado y fuidez.
Lo que sí debería plantearse urgentemente la editorial es la contratación de un buen profesional en corrección de estilo porque, desgraciadamente, hay bastantes erratas e incluso a veces pequeños fallos que nos resultan desconcertantes, como cuando en la página 349 leemos que había «dos demonios, dos santos, y dos demonios», lo que deja claro que el corrector no ha acabado de enterarse de que se trata de dos especies diferentes (“devils” y “demons” en original), y no parece fallo del traductor, que en otras ocasiones ha demostrado dominar perfectamente las diferencias.
No queda más que agradecer a la editorial la perspicacia de haber hecho accesible al público español esta novela, y al autor el haber escrito una obra original, atrevida, iconoclasta, que nos hace a un tiempo reflexionar y reir, que nos deja con un excelente sabor de boca y con muchas ganas de seguir leyendo novelas suyas. ¿Para cuándo otra, Steve?

Elia Barceló
Cursó los estudios de Filología Anglogermánica en la ciudad de Valencia en 1979 y Filología Hispánica en la Universidad de Innsbruck,Austria en 1995, obteniendo el doctorado en esta última. Ahora reside en Áustria dónde escribe desde 1981 y donde es profesora de literatura hispánica.

Es una de las tres escritoras más importantes, en lengua castellana, del género de la ciencia-ficción, junto con la argentina Angélica Gorodischer y la cubana Daína Chaviano, junto a quienes integra lo que se ha denominado "la trinidad femenina de la ciencia-ficción en Hispanoamérica".

Parte de su obra ha sido traducida al francés, al italiano, al catalán y al esperanto. Desde 1997 escribe también para los más jóvenes.

Premios [editar]

* Premio Ignotus de ciencia ficción en 1991
* Premio EDEBÉ de literatura juvenil en 1997 y 2006
* Premio Internacional de novela corta de ciencia ficción de la Universidad Politécnica de Cataluña 1993.

Obras más destacadas [editar]

* Sagrada. Ediciones B, Barcelona, 1989.
* Consecuencias Naturales. Madrid, 1994
* El mundo de Yarek, premio UPC 1993, Barcelona, 1994. Editorial Lengua de Trapo
* El caso del Artista Cruel, premio Edebé, 1998.
* La mano de Fatma, 2001.
* El vuelo del hipogrifo, 2002. Editorial Lengua de Trapo
* El caso del crimen de la ópera, 2002.
* El secreto del orfebre, 2003. Editorial Lengua de Trapo
* Disfraces terribles. Barcelona, 2004. Editorial Lengua de Trapo
* El contrincante, 2004.
* Cordeluna, premio Edebé, 2007.
* Corazón de Tango, 2007. Editorial 451 Editores

viernes, 29 de agosto de 2008

Los héroes nunca fueron lo que eran (I)

(Sección dedicada al Tigre Oyola, fan, como yo, de las historietas de super héroes)

Tantos años creyendo que eran ejemplo de rectirud moral y todo eso, media infancia agarrándote a trompadas con los que decían que Batman y Robin eran más que amigos, y que por algo Superman nunca le daba un supermeneo a la Lois Lane; tanto tiempo pregonando que lo de las mallas ajustadas era para tener más facilidad de movimiento frente a los super villanos... para descubrir que uno estaba equivocado.
(La mayoría de las portadas están sacadas de
www.superdickery.com, una página dedicada a las rarezas de los héroes)


Creo que han borrado los bocadillos del original, pero me dice gente que sabe más inglés que yo (no es difícil), que los textos seguían dando miedo...




Puede que todo empezará aquí, junto a este lago, y que la culpa, como siempre sospechamos, fuera de Robin. Atención a las caritas de Bruce y Clark, que hablan por sí solas...




Otro que bien baila. El poderoso Thor ofreciendo a los niños ¿"quieres tocar mi martillo?".... Sin palabras. ya no se puede confiar ni en los dioses del Olimpo.



¿Qué es lo que el gigante, de espaldas, muestra a los niños que los miran con asombro? Al menos en la portada tienen el detalle de advertir que son historias para audultos...



Ya he dicho que mi inglés es casi inexistente. Pero aún así, y tras consultar, el texto original de esta viñeta o deja dudas: cada oveja con su pareja...

Dentro de unos días,más...

jueves, 28 de agosto de 2008

Los cuentos del huevo izquierdo


(Foto Guadalupe Alonso)


Un lunar con forma de estrella


Estoy harto de majaras. Se me pegan sin previo aviso y la naturalidad con que asumo sus delirios me preocupa, a veces. Cuando estoy sobrio. Me preocupa pocas veces.
Entra esa mujer y los clientes contienen el aliento Hay mucha gente hoy porque tocará alguna banda de jazz con muchas ganas pero poco talento. Se sienta a mi lado. Pide un whisky y me dice:
—No pienso follar contigo. Eres un canalla.
Va a empezar. Estoy harto de majaras. De verdad. Pero ha dicho “canalla”. No ha dicho mamón, maldito cabrón, jodido hijo de puta, o definición parecida. Una mujer que dice canalla frunciendo así los labios, tiene algo de reina. Aunque esté loca.
Lleva un vestido rojo y el amarillo de su pelo en un sol de bote pero le sienta muy bien. La tela roja ciñe su cuerpo y no le sobra nada. El escote podría servir de escenario para la actuación de un coro de pueblo, pero dudo que nadie prestara atención a las voces ni a la melodía. Lola me asesina con la mirada pero nunca dirá nada. Nadie es de nadie y yo soy nadie.
—Eso es lo que eres: un canalla. Y ni sueñes en llevarme al servicio de este bar y romperme las bragas y hacérmelo contra los azulejos. Ni lo sueñes—. insiste ella.
—Llevo siglos sin soñar —informo—. Y sin romper bragas.
—No intentes liarme con tus tretas de poeta. He leído tu libro.
—No esperes que te felicite.
Se remueve en el taburete y el movimiento agita su cuerpo. Joder. Necesito otra cerveza.
Busco las cerillas en el bolsillo y las arrojo sobre la barra.
Cuento. Diez. Diez es par. Par es sí. Joder.
—La sexta, Poe —contabiliza Lola mientras me alcanza mi Maohu.
—No te hagas el apático —dice la rubia—. Sé que eres un maldito canalla. Con el cuento del escritor te dedicabas a engañar jovencitas ingenuas para tirártelas.
No discuto. Hace tiempo que sospecho lo mismo, pero entonces era tan idiota que pensaba lo contrario. Hasta que empecé a caer. Aún estoy en ello.
—“Pájaros de amor pegados en los azulejos y en los cuerpos”— declama con tono burlón. A mí también me suena muy cursi—. Menuda chorrada. ¿Te suena el nombre de Daniela? Tenía dieciéis años, hace unos siete..., delgada, cintura estrecha, caderas generosas, un lunar con forma de estrella en la teta izquierda...
Lo del lunar con forma de estrella sí que me suena de algo. Hubo un tiempo en que me interesó la astronomía. Luego dejó de interesarme todo.
La mujer abre su bolso, espia el contenido, comprueba que todavía lleva lo que busca y sigue hablando. Por algún motivo el bolso me parece muy pesado para ser tan pequeño.
La banda se prepara y antes del primer acorde se que atacarán con una versión de La chica de Ipanema. Atacar es el verbo adecuado.
—El taller literario. ¿Recuerdas? Daniela era sensible y tierna, llena de ideas y ganas de escribir. Y llevaba tu libro a todas partes. Su poema preferido era el de los azulejos, decía que dentro de la brutalidad de tus descripciones, había mucha dulzura...
Un lunar con forma de estrella en la teta izquierda. Diez cerillas y es un sí. Joder. Estoy harto de los majaras. La rubia se acerca y ya va por el tercer whisky sin soltar el bolso que pesa demasiado. Tiene un cuerpo de pecado y aunque intenta ser vulgar no puede ocultar que tiene clase. Y un pecho impresionante. Dos.
—Daniela hizo de todo para conocerte, y en cuanto supo del taller literario, se apuntó sin dudarlo. Decía que tu decisión de hacer las reuniones en un bar era un rasgo de autenticidad. JA.
No me gusta esto. Ella se acerca más en cada frase y las cerillas han dicho sí y el bolso entreabierto es una fea promesa. Recuerdo un lunar pero no en una teta.
—Daniela hizo lo posible por destacar, por llamar tu atención. Tenía una fotocopia de una foto tuya de una revista, ampliada y pegada sobre su cama.
—No es para tanto. Hay gente que tiene la foto de Michael Jackson.
—No juegues al cínico conmigo, Poe. ¿Así te llaman ahora, verdad? Me costó encontrarte, nadie sabía de tí y no pensé que hubieras caído tan bajo. Pero te encontré. Cuando una tiene una misión, acaba por cumplirla.
Mete la mano en el bolso pero se arrepiente. No es el momento.
Bebemos un rato en silencio. Varios moscones se acercan a ella pero los espanta con una mirada de desdén.
—Daniela estaba obsesionada por ese poema. Una guarrada más, un listo describiendo cómo se tira a una tía en el baño de un bar. Pero ella se lo sabía de memoria y siempre lo recitaba. Pero tú sólo tenías ojos para esa jodida cría calva… Una noche, la última noche que fue a tu asqueroso taller literario, no lo soportó más y se coló en el baño detrás de ti, se desnudó para ofrecerse, y tú la rechazaste.
Veo un desfile de baños y azulejos, estrellas que brillan en tetas izquierdas, y el humo de unos ojos que no consigo recordar. Eso fue antes de caer el todo, y desde entonces he oído varios cracs y muy pocos clics. Uno puede seguir tirando cuando oye un clic de vez en cuando. Pero cuando todo son cracs, sólo puede dejarse caer.
El local se anima y sólo veo la mano dentro del bolso. Termino mi cerveza. Las cerillas pares te arruinan la vida, porque significan “sí” y contra eso no se puede hacer mucho.
—Vamos —le digo y tomo su mano.
Nos mezclamos entre la gente que sigue el ritmo con la cabeza o con sus vasos. Lola ha quedado atrás. Entramos a los servicios. El Flautista loco mira su flauta extrañado. Sólo consigue tocar cuando se sienta en el váter y entonces sopla maravillas. Pero esta noche la flauta sigue muda. Me mira un momento y sale.
—Daniela...—dice ella.
La empujo sin violencia hacia una de las puertas. Busca con la mano en el bolso pequeño y pesado. La abrazo por detrás pero no se resiste. Le muerdo el cuello y gime. Mis manos caminan por su cuerpo, se meten debajo del vestido rojo, aferran sus caderas como si fueran asas de un ánfora llena de un líquido caliente y volátil. Encuentro las tiras del tanga y al sentir la presión se revuelve contra mí. Tiro hasta romperlas y la tela resbala hacia abajo. Juego con dedos en su sexo y está húmeda. Otra mano recoge el vestido rojo, acaricia su vientre y sube hasta el pecho. También bajo los tirantes y enrollo el vestido en su cintura. No lleva sujetador. No lo necesita.
—Daniela... dice otra vez pero se interrumpe.
Entran un par de clientes a descargar para hacer sitio para más cerveza. Hablan a tropezones pero comentan lo buena que está la rubia de la barra y que no se explican cómo pierde el tiempo con el borracho de Poe. Yo no pierdo el tiempo y buscó en mi pantalón y entro. Los tíos se van y nuestros gemidos rebotan en los azulejos del baño. Ni siquiera era un buen poema, no sé por qué a todas les causa el mismo efecto. La rubia colabora, gobierna con la cara contra los azulejos, ataca y vuelve, parece no advertir que su cabeza golpea contra la pared al volver. Todo es brumoso y ruin, todo es brillante. Sigo hasta estallar y un poco más, mientras ella se sacude. Y cuando salgo, suspira y recupera la decisión. Se vuelve con la mano dentro del bolso y ya no me importa.
—¿Por qué? —pregunta.
—¿Por qué no?
—¿Por qué ahora y no entonces, cuando Daniela...?
—Porque era una chiquilla tierna, porque hasta yo tengo mis principios, y, seguramente, porque estaría muy borracho. Además, el baño de aquél bar donde nos reuníamos, era muy cutre.
Me mira a los ojos y me sorprende que tenga unas ojeras nuevas, de sexo, y ese brillo en los ojos. Se baja el vestido. Antes se subir la parte superior, se exhibe. En la teta izquierda tiene un bonito lunar con forma de estrella.
—Llevo tiempo buscándote —dice mientras mantiene la mano en el bolso—. Tengo algo para ti.
Cierro los ojos. No vale. Quiero verlo venir. Los abro.
Saca un sobre que contiene un tarjetón de color sepia. Es una invitación para la boda de una tal Daniela López con un tal Orlando Sanz. Es un tarjetón caro, como la sala de fiestas donde se celebrará la fiesta.
—He podido olvidarte, canalla. He conocido a un chico bueno y sensible y me caso el sábado.
—Ya.
—¿Irás? —pregunta.
—No lo sé. ¿Habrá buena bebida?
—La mejor y en cantidad. Yo misma me ocupé de elegir el menú y la sala. Además, tiene unos baños impresionantes.
Se arregla el vestido y se marcha, como una reina.
Fumo un cigarrillo sentado en el inodoro.
Estoy harto de los majaras. De verdad.
Salgo al bar y eludo la mirada de Lola.
Busco la puerta de la calle y me siento en la acera.
Necesito mirar las estrellas.

domingo, 24 de agosto de 2008

Crítica de David G. Panadero

Matar y guardar la ropa. Carlos Salem. Salto de Página.

Todo ocurre por algún motivo.

Por David G. Panadero.

Cuando un escritor se enfrasca en la solitaria actividad de escribir una novela, lo hace porque tiene algo que contar, una historia que contar. Pero hay casos en los que el escritor parece tener muchas, muchísimas pequeñas historias que contar, plasmando en ellas sus vivencias, su forma de ver el mundo… Y así sucede con Carlos Salem en Matar y guardar la ropa. No caeremos en el atrevimiento de decir que se trata de una historia coral, que no lo es. De hecho, el autor plantea una historia que se sigue perfectamente, con planteamiento, nudo, lista de sospechosos y desenlace. Sin embargo –y aquí hemos de hacer todo el énfasis que sea necesario–, quien se quede con la sucesión de acontecimientos, quien siga la trama tal cual es, sin duda se estará perdiendo las deliciosas carreteras secundarias que plantea el autor, en las que, a menudo, aporta una pequeña enseñanza, plantea alguna duda, o al menos retrata alguna situación vital de indudable interés.
No olvidemos que Carlos Salem se está labrando una trayectoria de prestigio; su novela de debut, Camino de ida, ha sido reconocida con el galardón Memorial Silvero Cañada en la Semana Negra de 2008, y ello se debe a su gran calado psicológico, la habilidad para retratar y reconocer situaciones humanas, siempre con el sentido del humor –pelín canalla– por delante.
Respecto a Matar y guardar la ropa, El asesino a sueldo Número Tres es destinado a un camping nudista de Murcia. Se sabe que alguien debe morir; ¿pero quién? En un delicioso juego de azar que dejaría perplejo al mismísimo Paul Auster, las diferentes personas que han desempeñado un papel importante en la vida de Número Tres van apareciendo por el camping para disfrutar de unas tranquilas –¿hemos dicho tranquilas?– vacaciones. Su ex mujer pasaba por allí, al igual que el nuevo novio de ésta, un juez estrella infalible. Y al igual que el inolvidable amigo de la infancia…
Carlos Salem maneja la trama con habilidad, sorteándola de pequeños giros, regalándonos una prosa llena de fibra donde no hay palabras de más. Es imposible resistirse al contagio de diversión con que está escrita la obra, en la que, como decíamos, pasa revista a las diversas situaciones de la vida. En palabras de Arturo García Ramos, en ABCD, “Las virtudes de este narrador residen en buena medida en su vena irónica, en su visión paródica de la vida corriente sometida al más puro disparate”.
Todas estas reflexiones nos podrían llevar a señalar un rasgo muy llamativo de la obra: quizás, mirada a fondo, no pretenda ser una novela negra, en el sentido tradicional, con el poso realista que habitualmente se ha otorgado al género. Salem parece encontrarse más a gusto estableciendo estas metáforas vitales, desde las cuales reflexionar sobre las relaciones: esos hijos que se sienten decepcionados por sus padres; esos maridos que achacan el paso del tiempo, conservando poco de lo que fueron en otros tiempos… En Matar y guardar la ropa no hay espacio para las casualidades. “En las novelas, como en la realidad, todo ocurre por algún motivo”

(David G.Panadero es periodista, editor, crítico y escritor, no necesariamente en ese orden. Entre muchas otras tareas, es el director y alma mater de "Prótesis", publicación dedicada al crímen". Es, también, un experto en novela negra de los que sabe cuántos cafés se tomaba Marlowe en "El largo adiós", y además analiza el porqué, y uno de los tipos cuya crítica de mi segunda novela más temía,no por que tenga mala leche, sino porque sabe y mucho... UF! hubo suerte. Gracias, David)

sábado, 23 de agosto de 2008

Semana Negra y fecunda (II)

(Falta tiempo y sobran fotos y gente a la que agradecer esos días en Gijón en los que la XXI Semana Negra fue una excelente coartada para hablar de lo que nos gusta y conocer gente que te demnuestra que no estás loco o que por lo menos hay más locos y eso ayuda. Así que seguiré colgando las fotos a medida que vaya pudiendo, como una forma de seguir alli...)




Judith Vernat, editora de Moisson Rouge, una de las editoriales francesas que se interesó por lo que pasaba en Gijón y buscó la forma de llevar esas palabras engras en español al idioma de los galos. En el primer tirmestre inaguran una colección dedicada a la Semana Negra...




El formidable novelista cubano Lorenzo Lunar, Paco Ignacio Taibo II, padre de la criatura que cumplía 21 años, y el novelista Sebastien Rutés, autor de La mortaja del Viejo Mundo ,que ojalá veamos pronto publicada en español, y un tipo de esos con los que te apetece seguir en contacto. En eso estamos...





Servidor, el Tigre Oyola y al centro Daniel Martínez, uno de nuestos esditores de Salto de Página, que todavía no se podía creer el doblete logrado por Chamamé y Camino de ida, Premios Hammett y Silverio Cañada respectivamente. (nosotros tampoco nos lo terminábamos de creer...)





Aquí pidiéndole un autógrafo a Ernesto Mallo, otro descubrimiento, como persona y como novelista. El año pasado ganó el Cañada con La Aguja en el pajar y este año fue finalista del Hammett con Delincuente Argentino (y no es una auobiografía, como yo creia...)


Foto de familia de los ganadores de los diferentes premios de la XXI Semana Negra de Gijón:
Atrás, a la izquierda, Javier Negrete (Ganador del Premio Celsius 232 a la mejor novela de ciencia ficción con "Alejandro Magno y las águilas de Roma"), Leonardo Oyola (Ganador del premio Dashiel Hammett a la mejor novela policial en castellano ocn "Chamamé"). Delante, a la iquierda, Antonio Sarabia (Ganador del premio Espartaco de novela Histórica con "Troya al amanecer"), Carlos Salem (Ganador del Memorial Silverio Cañada a la mejor primera novela con "Camino de ida"), Sanjuana Martínez,( Premio Rodolfo Walsh a la mejor obra de no ficción policiaca con "Prueba de Fe"), y Juan Ramón Biedma (ganador ex aequo con Oyola del premio Dashiel Hammett con "El imán y la brújula")



Otro descubrimiento: Juan Esteban Constaín, novelista colombiano afincando en Italia, finalista del Premio Espartaco de Novela Histórica con "El naufragio del Imperio", un libro que excede el género por su calidad y originalidad bien documentada. No en vano Constaín, pese a su juventud, es todo un erudito y sin embargo, un tipo divertido. De hecho,el extraño gorro que llevo es suyo...




El novelista chileno Roberto Ampuero, autor entre otros de "Los amantes de Estocolmo" y que en breve publicará "El caso Neruda", que supone el retorno de su detective, Cayetano Brulé. Pese a estar traducido a una dedcena de udiomas y acumular otros tanto premios literarios, Ampuero es un tipo llano y amable, dispuesto a conversar con novatos pesados como yo...


La escritora argentina Alejandra Zina, nostálgica ante la parrilla circular cargada de carne. Y eso que en Gijón nos alimentaron muy bien... Pero es que donde se ponga una parilla...



El gran-gran Jesús Lens, uno de los que mantiene las cladera encendidas todo el año desde su blog, Pateando el mundo, con el mérito agregado de no ser un espacio sólo de novela negra. Lena acerca la gente a los libros y viceversa, y lo hace con generosidad infatigable. (NOTA: No es que é esté subido en una escalera o yo metido en un pozo: es que tío es así de alto...)

CONTINUARÁ....

miércoles, 20 de agosto de 2008

Migas de pan






Cuando era niño, a Sotanovsky el mundo se le antojaba un lugar enorme, lleno de lugares y personas que eran puntos diminutos.Y llegar de un punto al otro representaba el riesgo de equivocar el camino.
Su mayor temor, era perderse.
Por eso iba fijando cada detalle con la mirada, erosionando buzones, señoritas en edad de merecer, portales y jubilados en sus respectivos bancos. Pero los ojos se le llenaban y cuando lloraba, sobre todo si ocurría en abril, sentía que cada lágrima le iba lavando datos de un valor incalculable.
Buscó consuelo en el saber, pero los filósofos griegos no le fueron de ayuda. El que decía que un río no era nunca el mismo rió le hizo pensar en el suicidio temprano, y al buscar una guía en Aristóteles, el método peripatético, aplicado a sus desvelos,se le quedaba en patético y gracias.
Cuando llegó a la adolescencia, se empeñaba en pensar que no había llegado: la había encontrado, aunque nunca supo cómo ni para qué. Cuando se incendió su instituto, dudó entre salvar el contenido de la sala de mapas y el contenido del vestido azul de la joven profesora de historia. Salvó a la profesora, y en agradecimiento, ella le enseñó a recorrer los senderos de su cuerpo guiándose por un sistema de gemidos y lunares que si bien no era demasiado exacto, al menos resultó revelador.
Su reloj era una brújula,su llavero un sextante, pero dejó de orientarse por el sol cuando comenzó a sospechar que la esfera cambiaba de trayecto sólo para confundirlo.
Lo de las migas de pan fue un resabio de niñez y cuentos, pero al menos le proporcionaba la tranquilidad de dejar una huella reconocible para volver sobre sus pasos, y alimento suficiente en los bolsillos si el hambre lo asaltaba en mitad de una excursión por la ciudad. El único problema eran las palomas, comedoras de senderos de regreso, ante las que desarrolló primero un odio tenaz, y luego un desapasionado instinto de eliminación. Nada personal.
Pero el mundo se le seguía antojando un bosque enorme en el que cada árbol mareaba las direcciones y cada arbusto era un cruce de caminos. Comenzó entonces a reforzar los rastros de migas de pan con otros indicios: la nariz desmesurada de una señora con un perro, la triste mirada nostálgica de un adolescente que suspiraba en una esquina, un paquete de cigarrillos en la acera, vacío y pisoteado y sin intención aparente de ir a ninguna parte. Desesperaba al comprobar la tendencia perversa de esas señales a cambiar de sitio, confundiendo sus pasos y sus actos. Así, por culpa de un gato negro con el morro salpicado de blanco, la tarde en que iba a declararle su amor eterno a una rubia licenciosa, acabó en el portal y el cuerpo de una morena tímida con avidez de contratos, de la que tardó años en librarse. Y lo peor fue que, de todas su señales vivientes, de todos los jalones con que marcaba sus itinerarios, el único que permanecía inmóvil era la morena tímida ávida de contratos. Por eso acababa volviendo a ella, incluso un cuarto de hora después de haberle anunciado que se marchaba para siempre.
Casi todo lo que ganaba lo gastaba en pan y en medios para eliminar a las palomas. Y así fue creciendo, con la certeza del error alojado en la suela de sus zapatos.
El mundo le seguía pareciendo enorme, y sus habitantes, él incluido, minúsculos puntos tan insignificantes como las migas de pan que cargaba en los bolsillos.
En uno de sus retornos por error, la morena tímida, etc, declaró haber hallado la solución a su problema y le regaló un GPS. Él estudió el aparato y concluyó que semejante adelanto técnico de poco lo servía: no deseaba saber adonde estaba en cada momento, sino cómo volver a ellos.
Cierta mañana, cuando ya pisaba la madurez, tuvo seguridad de la inmensidad del mundo y de su propia pequeñez. Caminaba por el parque, atento a los senderos, y supo que cada humano era una miga de pan que marcaba un trayecto exacto o caprichoso, hitos ajenos que igual marcaban el camino de la vida, que el sendero tortuoso de la muerte. O que no marcaban nada. Entonces vio la sombra que intuyó una nube colosal cruzando el cielo, y al alzar la cabeza vio descender la gigantesca paloma, con el pico abierto, sobre él.
Nada personal
Su último pensamiento fue que al coloso que lo había dejado caer en su camino, le costaría mucho hallar el trayecto de regreso.
Y sonrió por primera y última vez